Trucos para no malgastar gas

La calefacción y el agua caliente son esenciales en nuestro día a día, especialmente en los meses más fríos

Trucos para no malgastar gas en tu caldera y ahorrar en tu factura

La calefacción y el agua caliente son esenciales en nuestro día a día, especialmente en los meses más fríos. Sin embargo, el uso indebido o poco eficiente de la caldera de gas puede traducirse en un importante gasto energético y económico. Afortunadamente, existen trucos y recomendaciones sencillas que pueden ayudarte a optimizar su funcionamiento, reducir el consumo de gas y cuidar el medio ambiente. ¡Toma nota!

1. Regula correctamente la temperatura

Uno de los errores más comunes es ajustar la temperatura de la caldera por encima de lo necesario. Para el agua caliente sanitaria, se recomienda mantenerla entre 35 °C y 40 °C, mientras que para la calefacción, lo ideal es programarla entre 19 °C y 21 °C. Cada grado de más puede suponer hasta un 7% adicional en el consumo energético.

2. Programa horarios de encendido

No es necesario que la caldera funcione todo el día. Utiliza un programador o un termostato inteligente para encender la calefacción solo cuando estés en casa. Además, puedes programar el apagado automático durante la noche o en horas de menor uso.

3. Mantenimiento regular

Una caldera sucia o con piezas desgastadas consume más gas de lo necesario. Realiza revisiones periódicas (al menos una vez al año) para garantizar su buen estado. Un técnico puede ajustar y limpiar el sistema para que funcione con máxima eficiencia.

4. Purga los radiadores

El aire acumulado en los radiadores impide que el calor se distribuya uniformemente, lo que obliga a la caldera a trabajar más. Purgarlos al menos una vez por temporada mejora la eficiencia de todo el sistema.

5. Aísla bien tu vivienda

Una casa bien aislada necesita menos calefacción. Revisa puertas, ventanas y cerramientos para evitar fugas de calor. Instalar burletes o cortinas térmicas también puede marcar la diferencia.

6. Apaga la calefacción al ventilar

Ventilar es necesario, pero si dejas la calefacción encendida mientras abres las ventanas, estarás malgastando gas innecesariamente. Con 10 minutos de ventilación diaria es suficiente, y mejor si apagas la caldera durante ese tiempo.

En definitiva, controlar el uso de tu caldera no solo te ayuda a ahorrar en la factura del gas, sino que también contribuye a un consumo energético más responsable y sostenible. ¡Tu bolsillo y el planeta te lo agradecerán!